Autor: Berrocal, A.
Caso: Felino con una Rinitis Micótica.
Paciente: Gata, cruce, hembra estéril de 3 años.
Historia clínica: Era una paciente callejera, la cual fue adaptada hace cerca de seis meses. Al momento de su adopción, ya presentaba una pequeña protuberancia en la mucosa de la fosa nasal derecha. Con el tiempo, La lesión continúo creciendo, provocando posteriormente una rinorragía. Ver fig.1.
Hallazgos Macroscópicos: Se reciben dos biopsias pequeñas una es más oscura que la otra. Además, de estas dos biopsias, se realizaron dos improntas para estudio citológico.
Hallazgos citológicos. Está compuesta principalmente por eritrocitos sin la presencia de plaquetas. En medio de los eritrocitos, se observan unas estructuras que se asemeja a micelio a veces pareciera que están gemando. Estas estructuras a su vez se ven que están siendo englobadas (fagocitadas) por células muy grandes con mucho citoplasma. Ver fig.2.
Hallazgos histopatológicos: Toda la submucosa, esta infiltrada por células inflamatorias principalmente de origen histiocítico con mucho citoplasma rosado-pálido y de aspecto espumoso. Además, hay presencia de neutrófilos y linfocitos. En medio de estas células inflamatorias se encuentran unas estructuras en general redondas de aproximadamente 7-8 micras de ancho, con un halo vacío, luego mas internamente hay una pared gruesa con un contenido citoplasmático grisáceo. A veces pareciera que algunas de ellas están gemando. Ver fig. 3 A-B.
Adicionalmente, del tejido ya fijado en parafina se le realizó una tinción especial de P.A.S. la cual mostró con mayor detalle la morfología del hongo, con formas delgadas 5-7 micras, septadas algunas gemando. Fig. 4 A-B.
Conclusión Diagnóstica: Dos improntas y dos biopsias de un tejido proveniente de la mucosa nasal derecha. Se trata de una Difusa Rinitis Piogranulomatosa causada por un hongo del grupo de los no pigmentados, con una morfología similar a la reportada en el grupo de los Hialohifomicosis sp. Para poder lograr la identificación de genero y especie, se requieren otras técnicas diagnosticas no disponibles(presupuesto) para este caso.
Breve Discusión: Existe un grupo de hongos poco frecuentes, conocidos como oportunistas, los cuales viven en el medio ambiente especialmente en suelos. En los últimos años, este grupo hongos ha emergido especialmente en pequeñas especies que padecen de algún compromiso de su sistema inmune (inmunosupresas), con varias presentaciones clínicas, principalmente cutáneas o de la mucosa nasal. (Dedeaux A, et al. 2018.). Por ser un grupo de hongos tan variado, para poder saber el genero y la especie, es necesario además, de la morfología microscópica, el poder realizar un cultivo en un laboratorio especializado o de lo contrario, usar técnicas moleculares que ayuden a su identificación, entre ellas las PCR panfungales las cuales tienen la ventaja de que se pueden trabajar con tejido ya fijado en parafina (https://tvmdl.tamu.edu/tests/panfungal-pcr/). Lo cual generalmente por razones de presupuesto no es posible hacer la identificación de genero y especie. Por consiguiente, la identificación microscópica (tinción rutinaria de Hematoxilina y Eosina) es la que se utiliza con mayor frecuencia analizando la morfología del hongo. En el caso especifico de estos hongos oportunistas, se estudia si son o no hongos pigmentados. También, el diámetro de las hifas y si son o no septadas. Adicionalmente para una mejor visualización se pueden hacer algunas tinciones especiales como el Grocott y el P.A.S. Basado en esos criterios morfológicos, hay tres grandes grupos de hongos oportunistas. Los Hialohifomicosis son hongos no pigmentados. Es un amplio grupo con muchos géneros, los más reportados son: Fusarium sp, Sagemonella sp, etc. El segundo grupo son los Feohifomicosis. Estos hongos tanto sus hifas o levaduras son pigmentadas (tienen un componente de melanina). En este grupo los más comunes son: Alternaria sp, Curvularia sp Exophiala sp, Fonsecaea sp etc. Con un tercer grupo, los Micetomas Eumicóticos, son hongos que se caracterizan por formar colonias con gránulos negros o blancos. Finalmente, para que la infección de piel o de una mucosa ocurra, es necesario que previamente suceda algún tipo de trauma o laceración para que el hongo pueda penetrar. Cuando esto sucede las presentaciones clínicas son variadas, como, por ejemplo, la formación de nódulos cutáneos o de la mucosa nasal. También, pueden causar lesiones ulceradas, fistulizadas o costrosas, por esta razón el abordaje clínico de estos casos es siempre considerando los posibles diagnósticos diferenciales, es decir lesiones que pueden tener un aspecto macroscópico parecido, pero que tienen otra etiología. Ver los siguientes dos ejemplos. Fig. 5 A y B.
Bibliografía.
-Dedeaux, A, Grooters, A. et al. Opportunistic Fungal Infections in Small Animals. J. Am. Anim. Hosp. Assoc. 2018; 54: 327-337.
-Lloret. A. Hartmann, K, et al. Rare Opportunistic Mycoses in Cats: Phaeohyphomycosis and Hyalohyphomycosis. Journal of Feline Med. and Surg (2013) 15, 628-630.